Ayer, dominguito agradable.
Fuí al centro, y nuevamente reconfirmé que vivo en una ciudad caótica pero hermosa. La gente es de lo más diversa, de lo más hermosa; tan nuestra.
En el centro se siente más México. Me gusta. El centro tiene su encanto, lo nuevo, lo viejo y lo antiguo. Bello. Acá las fotos:
lunes, 22 de febrero de 2010
Suscribirse a:
Entradas (Atom)